Varada en Cesantes

Acuarela (42x29 cms.) sobre papel Arches

 

Arbolando

Aguada color sepia (34x24)

 

Mi nieta intangible

Ana Ofelia

Retrato de Cristina (por José Luis) - Retrato de José Luis (por Cristina)

Carmiña

Especial, Única, Admirable

Acuarela sobre papel Canson

Mi primera caricatura

Paco

Retrato de familia

Lápiz plomo sobre papel Fabriano 60x40

Bella y palíndromo

 

SarabaraS

Acuarela

Allá por Viveiro

Casa con horreo

 

 

 

 

 

 

 

Acuarela (30x45 cms.) sobre papel Arches

"Domingos"

"Minguiños"

(30x40 cms. aguada sobre papel Canson)

Pacía las vacas,el rey del prado, aún no llovía ácido. Eran felices  

Imágenes creadas por ordenador (CorelPhotopaint)

Raquel

Laura

"Mi coro" Retratos a lápiz y carboncillo

¡brava y noble!

La Jefa
Pastel 50x40

otras inquietudes; artesanía naval

El último hace casi 30 años. Casi me había olvidado de como se hacían.

Cuadro de nudos marineros (12 elementos) 30x20 cms.

Rebeca

Mi segundo pastel

Lara

mujer en la ventana

abrí la ventana....y entró aire fresco

Patache de Noya
Aguada en gris payne y sepia: 31x24

Hijo de bergantín guerrero y de goleta veloz, allá en ultramar, se reconvirtió a principios del siglo pasado en el rey del cabotaje comerciando en los puertos de Galicia y el Cantábrico.

Muelle en Portonovo
Acuarela sobre papel Ingress : 35x25

Verano del 97 

el segundo de tres mil....hasta el visto bueno

A lareira. Precursora de la domótica, imán familiar que despertaba todos los sentidos; el crepitar de la leña, las absorventes llamaradas, las "enxebres" emanaciones, el ardiente hollín, y arriba, ...aquel ocasional manjar.







Carboncillo y sanguina. 28x20 cms.

Terraza del café por la noche (en Arlés)

Lámina colgada en mi salón, homenajeando al "loco". Representa el perfecto mestizaje de las dos luces nocturnas.

Para una pareja encantadora

Leiteiras.  Mujeres que despertaban a la propia madrugada, cargaban al crepúsculo por esas "corredoiras" de agua y barro el preciado oro blanco  sobre sus enhiestas y esperanzadas cabezas. Las "sellas" que flotaban  sobre el "molido" por arte de magia, como si de un número equilibrista circense se tratase, me dejaban perplejo y admirado. Aquellas  "leiteiras" que recorrían bajo la sempiterna lluvia las petreas y húmedas ruas de Santiago,  amparadas del mal tiempo por los viejos soportales, alimentaban el crecer de un pueblo que tanto les debe.  Esta aguada, está inspirada en una fotografía del antiguo libro "Guia de Galicia" del  poeta e historiador Jose María Castroviejo y Blanco-Cicerón (1909-1983), y forma ya parte de ese conjunto de recuerdos gráficos de mi  infancia.

                         Colgados en una pared muy apropiada

 

Llevaba como dedicatoria:  "todos los caminos son de ida y vuelta".

Regalo para un matrimonio por haber surcado esos mares juntos..... durante más de medio siglo. ¡Toda una odisea!

El espíritu del camino, la experiencia reconfortante, la solidaridad, la confraternización, el compañerismo, los valores renovados,  las bellas anécdotas del "camiño", la naturaleza, la buena gente al pasar, la depuración del alma, las promesas, el esfuerzo, las dificultades, el sacrificio, a veces gotas de dolor. Y al final… la inmensa satisfacción del objetivo alcanzado: “a praza do Obradoiro”, “o Xacobeo”, “La Compostelana”. Santiago,  ….mi Santiago de Compostela (creía que los santiagueses obteníamos dispensa al nacer y nunca me lo había planteado).

Hoy descubrí al fin, todos los sentimientos del peregrino.  El por qué de esa abnegación.  A la altura de Fonseca, y sin conciencia por debajo de mis tobillos, se me encogió el corazón. Y entonces lo entendí todo.

Alguien ha dicho una vez que en la técnica de la acuarela, el hiperrealismo no era ortodoxo. Si bien es verdad que el encanto propio de la asociación papel-pigmento-agua se cimenta en la frescura de la pincelada y en la sugerencia de las formas, también es verdad que el arte no tiene dogmas ni la creatividad murallas.

Vosotros, que lograsteis vuestros sueños,

¿qué entendéis de sus ansias malogradas?

Vosotros, que gozasteis y sufristeis,

¿qué comprendéis de sus eternas lágrimas?

Y vosotros, en fin, cuyos recuerdos

son como niebla que disipa el alba,

¡qué sabéis del que lleva de los suyos

la eterna pesadumbre sobre el alma!

Rosalía de Castro . Fragmento del poema "Los tristes"

El sepia es el color que inspira  recuerdos de la infancia. Aquellas fotos viejas de nuestros ascendientes,  aquel "muiño no rio",  " a eira do palleiro", lugar de reunión vecinal, aquellas noches de carburo e historias "da santa compaña",  "o carro das vacas" en sepia", "a escola" en sepia, "carballeiras" en sepia,  ....